Vanessa Gutiérrez

Gracias, Zana. Si hablamos desde la sinceridad, no se te puede decir otra cosa.

Hablo por mí, pero comparto el sentimiento con muchísima gente de tu comarca, a juzgar por la de mensajes que me han llegado estos días hablando de ti.

Como político tengo infinidad de cosas que agradecerte, sin ser yo de Gordón (ya me gustaría, haber tenido un alcalde como tú). Te has quitado horas de sueño, de sentarte a la mesa a comer, ratos de ocio, horas leyendo libros, el sueldo… te has quitado vida propia para luchar por tu municipio y tus vecinos. Desde que empezaste a militar en Izquierda Unida has sido impecable en tus principios, intachable en hacer la vida de todos un poco mejor y más justa, implacable en tu lucha por el carbón. La misma lucha que ahora parece que aleja a Izquierda Unida de las cuencas, y de parte de su militancia. Hay quien no justifica ni entiende tu decisión de dimitir, porque eso de dimitir por honestidad no está bien visto ni está de moda. Supongo que es lo único que puedan echarte en cara. Quienes no aspiramos a tener un puesto en política, quienes han estado contigo en la mina, en las calles, en las barricadas, o en la junta vecinal peleando por las casas de Ciñera, apoyamos tu decisión, la entendemos y la agradecemos porque te honra a ti y nos honra a todos, que nadie se equivoque. A Izquierda Unida le honra tener a gente como tú.

Gracias por ser compañero y amigo. Por hacerme mejor persona. Por dejar que aprendiera de ti, y contigo. Por tirar de mucha gente cuando a veces era difícil tirar hasta por uno mismo. Por hacer de Izquierda Unida León un sitio donde mis principios no estuvieran desubicados. Desde que te conozco has puesto muchas cosas y a mucha gente por delante de ti y siempre has dejado tus intereses en último lugar.

Izquierda Unida pierde a un talento innegable de la provincia. Nos quedamos sin el minero alcalde, sin el alcalde rojo. Perdemos al imprescindible. Que la lucha no se acabe después de Zana, porque nuestros principios y nuestro programa son los de apoyar a la minería, como hemos hecho siempre. Seguimos del lado de los mineros porque no lo entendemos de otra forma. En esta provincia y en muchas otras, nadie puede reprochar a Izquierda Unida su defensa del carbón, nadie lo ha hecho mejor. Es cierto que tenemos una memoria selectiva, y a veces a muy corto plazo, pero no hace falta más que ojear un par de periódicos de hace menos de dos meses para ver cómo, a solo dos semanas de la notificación de cierre de las minas que llegaba desde Bruselas, Juan Vicente Herrera seguía mintiendo sobre el futuro del carbón, como han hecho él y el Partido Popular durante los últimos 20 años. Que tampoco se erija en redentor el PSOE por hacerse algunas fotos y colgarse una medallita a 3 semanas de las elecciones. No nos engañemos, sabemos que así es como funciona, pero en esta provincia, por desgracia, sabemos que el PSOE puso la soga al cuello de la minería y el PP apretó el nudo que la ahogaba.

La ética de Zana solo cabían en Izquierda Unida. He visto muy pocas dimisiones en la provincia por el mismo motivo. Mientras en Madrid se firmaban sentencias de muerte al carbón, Juan Vicente Herrera sacaba pecho diciendo que “el carbón iba por el buen camino” en Bruselas (titular de mayo de 2016). El buen camino para los de siempre. Jamás ha pensado en los mineros (por eso nunca se para a hablar con ellos, ni los invita a sus mítines, si bien al contrario prefiere desalojarlos, porque los mineros al PP le molestan. Está claro). Los principios de Zana y de Izquierda Unida son los únicos que han peleado siempre por la supervivencia del carbón, cuando los demás hacían negocio con su cierre y nos llamaban locos por seguir partiéndonos la rabia, las ganas y a veces la cara, literalmente, por evitar el desmantelamiento del sector minero.

Que se repartan ahora las migajas de la minería el PP y el PSOE, que es en lo que se han esforzado años en conseguir, que tenga la decencia de respetar la dignidad de la gente de las cuencas, el orgullo de la provincia, y que al menos no nos traten de tontos. Que dejen de engañarnos, si pueden hacerlo. Ahora viene muy bien decir que Izquierda Unida se desmarca del apoyo al carbón porque estamos en campaña y en campaña todo vale. Pero señor Tudanca, señor Luis Rodríguez, ustedes deben de creer que la campaña bien vale una foto, pero la mina no se vende, ni se regala. Porque a eso fueron ustedes a Madrid, como siempre. A hacerse la foto. Poco trabajo y poco apoyo hemos visto por parte del sedicente partido Obrero.

Que mientras agonizan las cuencas tras la última estocada del Partido Popular no le nieguen a los mineros parte de lo que les debemos, que no los engañen, que no tengan la desvergüenza de subirse al escenario en un mítin, rodeados de políticos, y darse palmaditas en la espalda, cuando nunca han bajado a la calle a mirar a los ojos de un minero para contarle la verdad de cómo están las cosas.

Eso solo lo hacía Zana.