Calidad y excelencia de producto son dos cualidades que se trasmiten a través de nuestra gastronomía, uno de los principales motores de atracción turística en España. Calidad y excelencia de producto, una tendencia en alza que mueve cada vez más la confianza y preferencias del consumidor. Calidad y excelencia de producto, un indiscutible valor añadido que supone una gran oportunidad para los productores en el posicionamiento del producto y en sus exportaciones.
En España contamos con tres tipologías de calidad diferenciada: Denominación de Origen Protegida (D.O.P.), Indicación Geográfica Protegida (I.G.P.) y Especialidades Tradicionales Garantizadas (E.T.G). Las D.O.P. e I.G.P protegen, de una u otra manera, el origen geográfico de los alimentos mientras que las E.T.G. se centran en los productos que se han producido empleando materias primas tradicionales o son elaborados con una metodología tradicional.
La Unión Europa, a través de la Comisión Europea, en una gran impulso a la calidad diferenciada, aprobaba en 2.014 un paquete de medidas encaminadas a financiar hasta el 50 % de la publicidad y acciones promocionales para los productos agroalimentarios con la certificación de calidad diferenciada, a través de 20 programas de promoción de productos agrícolas.
En España, donde se estima que al menos 7 millones de turistas de los 65 millones que nos visitan lo hacen motivados por nuestra gastronomía, el MAGRAMA ha puesto la promoción de los productos españoles agroalimentarios en el eje del Plan Estratégico de Internacionalización de la Industria Agroalimentaria. En la Feria Internacional de Turismo (FITUR) 2016, el MAGRAMA potenciaba la riqueza y variedad gastronómica española y las posibilidades que ofrece el trinomio alimentación-gastronomía-turismo. Por otra parte la Ley 6/2015 ha supuesto un nuevo régimen jurídico para un elevado número de alimentos en línea con la normativa UE en materia de DOP e IGP, con la intención de salvaguardar los derechos de productores y consumidores.
La ley contribuye a la potenciación de la calidad diferenciada mediante las DOP e IGP de ámbito supraautonómico a través de la valorización de estos productos por parte del consumidor, además de constituirse en el elemento que vertebra el tejido rural en España y no olvidemos que refuerza la imagen de los productos españoles en el exterior.
Según el estudio Luxury Advise realizado por la Comisión Europea en relación al valor añadido de los productos DOP e IGP, los productos de calidad diferenciada aunque tienen un precio superior a otros, una buena parte de los consumidores está dispuesta a pagarlo. Para ellos, sus reducidas producciones y metodologías artesanales certificadas son una garantía de productos naturales, de calidad constante, proximidad, sostenibilidad, etc. En definitiva, un plus de confianza que identifica a estos alimentos con DOP e IGP con productos premium o gourmet.
El estudio también concluye que al tradicional consumidor de productos gourmet se le añade un nuevo perfil, más joven, con mayor conciencia ética, que busca experiencias auténticas asociadas con la comida, pero con poco tiempo y propenso a comer fuera de casa. La incorporación de ingredientes premium e ingredientes con denominación de origen para la captación de aquellos consumidores que priorizaban el componente hedónico puede ser una opción de desarrollo para la industria agroalimentaria.
Puesto que el concepto calidad es en gran medida una apreciación subjetiva se plantea la cuestión de si un sello de calidad diferenciada supone una ventaja competitiva real para los productores (lo que se traduce en ventas, exportaciones y penetración en terceros países) y si supone una sensibilización y apuesta en el consumidor por estos productos. Para tratar de resolver algunas de estas cuestiones se han creado los Paneles de Cata como herramienta de certificación, otorgadas por los consejos reguladores debe ser acreditado por (ENAC). El panel de cata tiene una doble función:
El proyecto europeo GILEARN, por ejemplo, se creó orientado a formar y sensibilizar a consumidores europeos respecto a los atributos sensoriales de los productos de las DOP. Esta formación e-learning introducía por primera vez la técnica de cata online guiada y ha aportado nuevas metodologías validadas y testadas a disposición de las DOP y Consejos Reguladores.
En España hay más de 300 figuras de calidad entre Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas, lo que sitúa a España en el tercer lugar de la Unión Europea, y estos productos generan un valor global en España que supera los 4.000 millones de euros.
Dentro de Castilla y León, León cuenta con un lugar preferente en la apuesta por la calidad agroalimentaria, actualmente la CCAA cuenta con las siguientes denominaciones protegidas:
Aunque (aun) sin los sellos DOP, IGP o ETG iniciativas de apuesta por la calidad y la promoción como Chorizo de León o Kesos de León han despuntado durante el último año con una enorme aceptación de los consumidores y de los canales de distribución alimentaria en aquellas Ferias donde han asistido.
La Unión Europea, España, el MAGRAMA, la sensibilización del consumidor, los datos de turismo y exportaciones, parece que tienen clara esta apuesta por la calidad diferenciada de producto, pero ¿lo tienen claro todos los productores?